Lo que quiero compartir es mi experiencia y lo que estoy
aprendiendo con la esperanza de que os entretenga durante unos minutos y de que
tal vez os pueda servir en un futuro.
Pues bien, lo primero que destacaría a la hora de realizar
algún evento importante en la empresa es: tener la mejor actitud por parte
los empresarios y de los mismos trabajadores. Creo que es realmente importante
que todos crean en lo que se va a hacer, pongan ilusión y ganas y que adopten
una actitud positiva y enérgica durante todo el proceso: desde el brainstorming
hasta el día que acabe el evento. Con esto se conseguirá involucrar a toda la
empresa, desarrollar el sentido de pertenecía y obtener los mejores resultados.
Acto seguido del punto anterior le llega el turno a la fase de brainstorming. Aquí es donde donde salen a la luz las mejores ideas a llevar a cabo. Para mí es uno de los
momentos más creativos y divertidos del proceso de planificación y organización del evento. Por ello que es necesario
perderle la vergüenza al “qué dirán” así como borrar las palabras “no se” de
nuestra mente y dejar volar la imaginación. Piensa que aportando ideas puedes
ayudar a generar la estrategia definitiva a llevar a cabo o tal vez sea una de
tus ideas la que se realice. Participando activamente conseguirás sorprenderte
y sorprender, ver de lo que eres capaz, mejorar tu autoestima y sentirte bien.
Te lo recomiendo.
Otro aspecto que me
gustaría destacar es la importancia de planificar con tiempo suficiente el
evento así como tener clara la finalidad
del mismo y el presupuesto que se va a destinar, para evitar así que las
prisas, la falta de tiempo y una mala organización puedan influir negativamente
en el resultado final. Si se quieren conseguir resultados óptimos se han de
cuidar estos aspectos y tener en cuenta cada detalle.
Cuando hablo sobre la finalidad del evento que se va a
realizar me refiero a tener claro cuál será el tipo de evento más idóneo, así
como también los objetivos que se pretenden conseguir con el mismo. Pues de
esto dependerá la estrategia a seguir. Por ejemplo, será distinta la finalidad
de un evento de promoción de un producto a la de celebración de un año de
apertura de la empresa.
También es importante tener en cuenta la personalidad de la
empresa, es decir, si tiene carácter juvenil y alocado o más formal, y adecuar
a esas características el estilo del evento. Con ello podemos aprovechar el
evento para difundir los valores propios de la empresa y crear notoriedad y distinción.
Estos son algunos aspectos que estamos trabajando en
la compañía de los cuales estoy aprendiendo mucho. No puedo decir mucho más
porque existe el factor sorpresa aunque prometo contaros los detalles una vez pasado el evento.
Yo he elegido estos seis aspectos a destacar ¿Qué otros añadirías
tu?
Muchas gracias por estar aquí. Espero que os haya gustado. ¡Nos vemos
pronto!
No hay comentarios:
Publicar un comentario